-"Próxima estación : San Pablo", anunció la cálida voz por los altoparlantes del carro de metro en el que viajaba, apretujado como siempre esa mañana camino al trabajo. No hubiera habido nada de raro en ese mensaje salvo por un pequeño detalle: estábamos llegando a la Estación Ecuador. Todo el mundo se miró extrañado y luego de la sorpresa solo atinamos a sonreírnos sin darle importancia al desfase producido pensando que ya todo se arreglaría prontamente. Craso error. El metro seguía avanzando por la línea 1 hacia Escuela Militar y cada vez nuevos pasajeros se extrañaban del anuncio pues juraban haberse subido en Estación Central y el metro les anunciaba:"Próxima estación : Estación Central". Quizás turbado por este desfase de estaciones es que me acerqué a la señora que tenía frente a mí, segundos antes de llegar a la estación de combinación Los Héroes y le pregunté : - "Perdón, Usted baja en las Rejas "? La dama en cuestión frunció el ceño, me miró extrañada y no supo qué decir pensando que algo no marchaba bien en mí. Quizás no entendió que la culpa la tenía el metro. Y ¿ qué otra cosa podía esperar? Yo también me había desfasado.
