El viaje de ida no estuvo exento de algunas turbulencias, especialmente al cruzar la cordillera y el aterrizaje fue tranquilo no sin antes experimentar cierta preocupación por la inclinación del avión al realizar el giro para tomar la pista de aterrizaje en Aeroparque. Una vez instalados en el hotel y después de almorzar en un bonito restaurant comenzamos un extenso recorrido peatonal por la gran ciudad. Al día siguiente conoceríamos otro Buenos Aires, ya más descansados, desde un Bus de Turismo. Fue un hermoso fin de semana en que pudimos compartir en familia y que recordaremos siempre. El domingo, de regreso a Santiago, el viaje fue tranquilo .... hasta sobrevolar la cordillera de los Andes. Durante el viaje, cuando el avión se bamboleaba y se sacudía pensaba "no, no viajo más en avión" y cuando el viaje era tranquilo mi pensamiento era más positivo "sí, volaría de nuevo, si no es para tanto"... hasta que una nueva turbulencia me hacia otra vez cambiar de opinión. Tal vez para viajar deba hacerlo como dice Anne, nuestra amiga de Nice, a quien no le gusta viajar en avión y su teoría es hacerlo el día en que se pueda permanecer en altura esperando que el planeta Tierra gire para luego poder descender tranquilamente..... Durante el viaje, pensé mucho en tu teoría, Anne.!
Las autoridades eclesiásticas de Lourdes anunciaron oficialmente, el pasado Jueves 11 de Octubre, que la inexplicable curación de la religiosa salesiana Luigina Traverso, ocurrida en 1965, fue reconocida por el Obispo de la Diócesis de Casale Monferrato (Italie) como un "milagro", el 68 atribuido a la intercesión de Nuestra Señora de Lourdes, registrado en este santuario del sur de Francia.
Cuando visitó Lourdes, el 23 de Julio de 1965, sor Luigina Traverso sufría una "ciática paralizante en meningocele", grave, paralizante y dolorosa enfermedad por la que había sido operada sin éxito en múltiples ocasiones. La religiosa que viajó en camilla a Lourdes y volvió a Italia por su propio pie, participó durante 5 días en todas las celebraciones recostada en camilla incapaz de permanecer de pie y dijo haber sentido un "fuerte calor" en el cuerpo y el deseo de levantarse cuando pasó el celebrante con la hostia consagrada. Inmediatamente pudo mover los miembros inferiores y el dolor, despues de tantos años de sufrimiento, desapareció totalmente.
La decisión de abrir un expediente con la sanación de esta religiosa se tomó al año siguiente, en 1966 y finalemente, el 28 de Julio de 2010 se conoció la confirmación de la sanación con el voto formal y unánime que determina que «la causa de esta sanación es inexplicable para el conocimiento científico actual».