No hay necesidad hoy de levantarnos temprano. Las maletas y el check in del vuelo quedaron listos la noche anterior, el desayuno está permitido hasta las 11 y el transfert vendrá a buscarnos al hotel justo al mediodía por lo que podemos hacer todo con calma. A la hora señalada hacemos el check out , nos imprimen las tarjetas de embarque y nos vamos al aeropuerto de Castro. El avión LAN llega y sale a tiempo no sin antes el capitán informarnos de turbulencias en el tramo Castro-Puerto Montt. Se agradece el aviso pues ese tramo de 30 minutos fue bien movido, tanto, como para pensar en hacerlo en bus la próxima vez y preferir cruzar el canal en transbordador. El tramo Puerto Montt-Santiago. por su parte, fue un viaje tranquilo, tanto de ida como de vuelta y nos permitió fotografiar los nevados volcanes del sur, como para repetirlo si se va nuevamente al sur. A las cinco de la tarde llegamos a Santiago. Tras el retiro de maletas y los saludos familiares de bienvenida llegamos hasta nuestra casa dando gracias por estas hermosas, descansadas y regaladas vacaciones. Hogar, dulce hogar.
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miércoles, 18 de febrero de 2015
Regresando a casa
No hay necesidad hoy de levantarnos temprano. Las maletas y el check in del vuelo quedaron listos la noche anterior, el desayuno está permitido hasta las 11 y el transfert vendrá a buscarnos al hotel justo al mediodía por lo que podemos hacer todo con calma. A la hora señalada hacemos el check out , nos imprimen las tarjetas de embarque y nos vamos al aeropuerto de Castro. El avión LAN llega y sale a tiempo no sin antes el capitán informarnos de turbulencias en el tramo Castro-Puerto Montt. Se agradece el aviso pues ese tramo de 30 minutos fue bien movido, tanto, como para pensar en hacerlo en bus la próxima vez y preferir cruzar el canal en transbordador. El tramo Puerto Montt-Santiago. por su parte, fue un viaje tranquilo, tanto de ida como de vuelta y nos permitió fotografiar los nevados volcanes del sur, como para repetirlo si se va nuevamente al sur. A las cinco de la tarde llegamos a Santiago. Tras el retiro de maletas y los saludos familiares de bienvenida llegamos hasta nuestra casa dando gracias por estas hermosas, descansadas y regaladas vacaciones. Hogar, dulce hogar.
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1 comentario:
Creo que atravesar el canal en transbordador será siempre preferible a hacerlo en avión o por el puente cuando esté listo pues es espectacular navegar por esas aguas.
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