Después de desayunar, comenzamos un recorrido a pié por las calles de Marsella; bajaremos por el Boulevard d'Athenes y luego por La Cannebiere hasta llegar al viejo puerto. Es difícil avanzar pues es un centro comercial importante y cuando llegamos al puerto, ya es hora de almorzar. Marsella, como puerto, tiene una gran cocina de pescados y mariscos los que por supuesto degustamos, antes de tomar un tour por la ciudad que nos llevará en primer término hasta Notre Dame de la Garde, basílica de estilo románico-bizantino, construída en lo alto de una colina sobre los cimientos de una fortaleza que hizo Francisco I en 1536 para resistir el asedio de Carlos V. En la cima del campanario se encuentra una estatua monumental de la Virgen María con el Niño Jesús, de 11,5 m de altura hecha en chapa de cobre dorado. Cuesta subir.. y mucho, los buses sólo llegan hasta cierto sector. Terminada la visita, nuestro siguiente bus nos llevará por distintos sectores del puerto. Esta vez no bajaremos en ningún punto de interés y los apreciaremos desde la comodidad del segundo piso de nuestro bus de turismo. Terminado el tour emprendemos el regreso a nuestro hotel cuando gotas de lluvia comienzan recién a caer y apuramos el paso para evitar la inminente lluvia que con truenos y relámpagos caerá sobre Marsella. Salvados!!
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1 comentario:
Bonito paseo.
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