Bruxelles : La Grand-Place

Hoy domingo decidimos, dada la cercanía, viajar hasta Bruselas, distante a menos de dos horas de París. Por algunos inconvenientes no pudimos tomar el tren en la Gare du Nord y debimos hacerlo tras una espera de dos horas, en el terminal 2 del aeropuerto Charles de Gaulle. El viaje fue muy cómodo y directo, sólo con una parada en la ciudad de Lille. Llegamos a la capital de Bélgica dispuestos a conocer sus principales atractivos turísticos. Fue así como llegamos hasta la Grand-Place, plaza central de Bruselas considerada una de las plazas más bellas del mundo, catalogada patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Tampoco podía faltar una visita al Manneken Pis, una pequeña estatua de bronce de un niño que según la leyenda, cuando tropas enemigas atacaban la ciudad orinó sobre la mecha encendida salvando a toda la población. Bruselas está llena de chocolaterías, tiendas de souvenirs y de figuras de TinTin, el famoso personaje de Tiras Cómicas. La luz solar,-aquí es invierno, se va muy rápido y nuestro recorrido terminó en la Rue des Bouchers, animada calle de locales de comida, con una rica cena. Ya cerca de las 11 de la noche regresamos al Hotel un poco cansados pero dispuestos a emprender al día siguiente un nuevo viaje.Para ampliar, clic en la imagen